¿A quién no le encanta la pizza? Incluso aquellos que no comen carne o queso pueden disfrutar de una deliciosa pizza vegana. Esta receta de pizza marinara sin queso complacerá incluso a los paladares más exigentes. Cualquiera puede hacerla en casa con ingredientes simples e instrucciones fáciles. ¡Así que manos a la obra, te encantará esta pizza!
No hace falta ser un maestro culinario para hacer esta receta y que te quede perfecta, porque se trata más bien manejar el concepto de simplicidad y autenticidad de la comida Italiana. Con solo unos pocos ingredientes, bien elegidos y tiempo de preparación mínimo, tendrás una comida que te transportará directamente a una plaza italiana.
Y bueno, si tienes poco tiempo o ingredientes, ¡hay muchos sustitutos con los que puedes jugar!
Esta receta puede ser un plato principal que sorprenda o una cena relajada entre semana, y se inspiró en nuestra receta tradicional de pizza con queso vegano, aunque con un par de diferencia que tienen que ver más con la elaboración y gestión de los pocos toppings, para lograr que te quede con la textura perfecta, ni mucha ni poca salsa y con un par añadidos en su medida justa
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💚 Por qué te encantará
🧾 Ingredientes
Necesitas tan solo unos pocos ingredientes.
- Harina de pan: proporciona a la masa una mayor cantidad de proteínas, dando a tu pizza esa textura deseable y masticable. Es el secreto para una corteza crujiente y tierna al mismo tiempo.
- Aceite de oliva virgen extra: añade un sabor rico y afrutado a la masa y ayuda a lograr esa corteza dorada. Además, está lleno de grasas saludables buenas para tu corazón.
- Levadura seca: el agente leudante que hace que la masa suba, creando una corteza ligera y esponjosa. Es lo que le da "vida" a tu fiesta de pizza.
- Azúcar moreno: ayuda a activar la levadura y añade un sutil dulzor para equilibrar los elementos salados. Es como el acompañante de tu levadura, asegurándose de que funcione correctamente.
- Sal: realza los sabores de todos los demás ingredientes y controla la actividad de la levadura.
Salsa de tomate
- Albahaca fresca
- Aceite de oliva virgen extra
- Ajo
- Azúcar moreno
- Sal
- Opcionalmente: orégano
🍽 Equipo necesario
- Bowl - XXX
- Fork or potato masher - XXX
🔪 Instrucciones
Paso 1: Amasar la masa de pizza. Ver detalles en nuestra publicación masa de pizza italiana casera.
Paso 2: rostiza unos ajos con una cucharadita de aceite de oliva a fuego medio alto, removiendo por 3-5 minutos hasta que estén bien dorados. Ponle una tapa durante la cocción y muévelo a lo dos minutos y apagar uno dos minutos después.
Paso 3: Hacer la salsa de tomate italiana, tipo marinara casera.
Paso 4: añadir un poco de aceite al molde con tus dedos o un spray de cocina. Luego añade un poco de harina o mejor aún, harina de sémola de trigo, que le aporte una textura especial.
Precalienta el horno al máximo (unos 250 ºC).
Consejo: Es importante estirar la bola de masa de pizza delicadamente para mantener la mayor cantidad de aire adentro, así que después de hacer una bola de masa del tamaño de un béisbol, estírala ligeramente con los dedos y luego colócala en la bandeja de horno engrasada, presionando con el dedo desde el centro hasta los bordes.
Paso 4: Extiende la masa de pizza en el molde.
Paso 4: agrega orégano seco.
Paso 6: hornea en el horno precalentado.
Hint: XXX
💡 Tips para la mejor pizza
Consejos para hornear
El momento de poner la pizza en el horno es quizás uno de los más importantes porque una cocción incorrecta podría anular todos nuestros sacrificios en un abrir y cerrar de ojos.
Recuerda que el horno debe estar bien calentado primero, al menos a 250 grados (la alta temperatura es esencial para cocinar la pizza de la mejor manera posible).
Si tienes un horno eléctrico, recuerda que tiende a calentarse más en la parte trasera, así que recuerda rotar la pizza de vez en cuando para obtener una cocción homogénea.
Pon un recipiente con agua en la parte inferior del horno para asegurar que el calor sea uniforme en el horno.
¡no abras el horno hasta que la pizza esté cocida!
Harina
Para tener una pizza más aireada, usa la mitad de harina común (Tipo 00) y la mitad de harina fuerte (Tipo 0). Si lo haces, permite al menos una hora extra para el levado, ya que la harina tipo 0 tiene más fuerza para levar, dado que tiene un mayor contenido de proteínas; así, más tiempo permite que el levado se desarrolle completamente.
Incluso puedes usar 100% de harina tipo 0, en cuyo caso, permitir un mínimo de 4-6 horas de levado e incluso toda la noche sería lo ideal.
📖 Variantes
Esta sencilla salsa de pizza casera puede variar con ingredientes simples porque puedes reemplazar fácilmente los componentes de la salsa marinara con elementos básicos de cocina como condimento italiano. También puedes usar polvo de cebolla y polvo de ajo para reemplazar la versión de condimentos frescos.
Incluso el orégano seco funciona bien. El único ingrediente que no cambiaría para hacer la salsa deliciosa es la albahaca fresca, ya que la albahaca seca realmente no tiene el mismo sabor.
🥢 ¿Cómo servir?
- Ensalada verde fresca: Una ensalada de rúcula o una ensalada simple con lechuga, tomate, pepino y aderezo de limón y aceite de oliva complementará muy bien la frescura de la pizza marinara.
- Tabla de antipasti: Prepara una tabla con aceitunas, tomates secados al sol y rodajas de berenjena en escabeche. Estos sabores mediterráneos realzarán los sabores de la pizza.
- Verduras asadas: Prepara una bandeja de vegetale rostizados. Si necesitas inspitación mira cómo asar verduras el horno en nuestra publicación previa.
- Agua infusionada: Refresca tu comida con un agua de pepino y limón.
- Vino tinto ligero: Una copa de vino tinto ligero, como un Chianti o un Pinot Noir, complementará perfectamente los sabores de la pizza marinara.
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📋 Receta
Pizza marinara sin queso
Equipo necesario
Ingredientes
Masa
- 500 g harina para pan reemplaza la mitad de la cantidad por harina de fuerza tipo manitoba. Recuerda, necesitarás harina extra para manejar.
- 2 cucharadas aceite de oliva extra virgen
- 2 cucharaditas sal marina fina
- 1 cucharada azúcar moreno
- 7 g levadura instantánea seca para cerveza aproximadamente 2-¼ cucharaditas
- 325 ml agua tibia
Opcional
- 2 cucharadas sémola de trigo duro para espolvorear la pizza
Salsa
- 2 ½ tazas salsa de tomate
- 4 dientes de ajo
- 2 cucharadas orégano seco
- 2 cucharadas aceite de oliva extra virgen
- 1 manojo albahaca fresca
- 1 cucharada azúcar moreno
- 1 cucharadita sal marina y pimienta negra recién molida
Instrucciones
Salsa:
- Picar el ajo y sofreír en el aceite de oliva a fuego medio durante 30 segundos.
- Añadir la salsa de tomate pasata, el orégano y las hojas de albahaca, el azúcar y la sal.
- Cocinar la salsa a fuego medio-bajo con tapa durante 20 minutos hasta que el líquido se haya reducido un tercio. Remover a mitad de cocción.
- Retirar del fuego y añadir las hojas de albahaca restantes. Ajustar.
Masa:
- Disolver el azúcar y la levadura seca en el agua tibia. Dejar reposar el líquido durante 10 minutos. Deberías ver burbujas en la parte superior de la mezcla.
- Mientras tanto, mezclar en un bol grande 400 gramos de harina y la sal.
- Añadir la mezcla de levadura y aceite de oliva y empezar a amasar.
- Sacar del bol y estirar y doblar durante 20 minutos, añadiendo más harina si es necesario.
- Dividir la masa en cuatro piezas. Estirar y doblar como si se hiciera un sobre, cerrando el bol por debajo.
- Colocar cada bola de masa en una bandeja de hornear engrasada con aceite de oliva, y cubrir cada una con film transparente, dejando espacio entre ellas.
- Dejar que la masa suba durante un mínimo de dos horas. La masa debe estar cerca de un lugar cálido, como un radiador, o se puede poner la bandeja en el horno con la luz encendida
- Precalentar el horno a 250 ºC.
- Poner un recipiente resistente al horno en la parte inferior del horno con una taza de agua.
- Engrasar el molde para pizza con aceite de oliva y opcionalmente espolvorear con sémola (trigo duro).
- Estirar la bola de masa, manteniendo tanto aire dentro de la masa para que tu pizza sea más esponjosa.
- Añadir ¾ de taza de salsa de tomate y extenderla bien. No añadir demasiada salsa, o hará que la masa se empape. Añadir un poco más de orégano si se desea.
- Hornear durante quince minutos sin abrir el horno.
- Añadir algunas hojas de albahaca fresca extra y servir caliente.
Notas
Harina
La harina todo uso también funciona para esta receta, pero preferimos la harina de pan para obtener un resultado de masa más aireado. Nos gusta la harina de pan de King Arthur. Como en todas las recetas de repostería, recomendamos pesar los ingredientes. 1 taza equivale a aproximadamente 120 gramos.Los datos nutricionales se calcularon para 2 pizzas grandes o 4 pizzas personales, para 4 personas.
•El mínimo de tiempo que recomendaría para dejar subir la masa es de dos horas, pero prefiero dejarla subir durante tres horas e incluso toda la noche. •Asegúrate de dejar subir la masa a una temperatura cálida. Yo la dejo cerca del calefactor de mi casa en invierno, o también puedes encender el horno a 50 ºC durante diez minutos y luego apagarlo antes de introducir la masa. •Me encanta la sémola y el efecto arenoso y polvoriento que tiene en la pizza. En mi opinión, la sémola hace que las pizzas tengan más una textura de pan de masa fermentada, lo cual me encanta. •Cuando dejes subir la masa, cubre los trozos de masa con film plástico. El aire es el peor enemigo de tu masa. Si la dejas destapada, se formará una corteza dura. •Pon cualquier sartén resistente al horno en la parte inferior del horno con 2 tazas de agua (esto ayuda a asegurar que la temperatura sea homogénea si no tienes un horno con ventilador). •Suponiendo que no tengas un Horno para Pizza o un Horno de Barro, que elevan su temperatura mucho más allá de cualquier horno convencional de casa, necesitas aumentar la temperatura al máximo (unos 250 ºC) y dejarlo precalentar durante veinte minutos. •¡No abras el horno hasta que la pizza esté lista! De lo contrario, perderás la temperatura y la masa no te lo perdonará.Información Nutricional
La información que se muestra es una estimación proporcionada por una calculadora de nutrición en línea. No debe considerarse un sustituto del consejo de un nutricionista profesional. Mira nuestra completa guía de Divulgación nutricional aquí.
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